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jueves, 28 de junio de 2012

Siria en estado de Guerra, pero ¿Contra quienes?

Por. Basem Tajeldine
Centro de Saberes Africanos

El gobierno sirio que dirige el valiente presidente Dr. Bashar Al Asad ha venido cumpliendo de forma consecuente con todas sus promesas de reformas, elecciones  parlamentarias y cambios ministeriales que había ofrecido desde el inicio de la conspiración internacional contra Siria como muestra de su buena voluntad y disposición para buscar la paz sin intervención extranjera. Pero de nada han valido todos los esfuerzos y ofrecimientos  para los grupos mercenarios-terroristas que enfrentan su gobierno legítimo por vía de las armas y el terror. Queda demostrado una vez más que Siria enfrenta una agresión extranjera a través de una invasión de fuerzas mercenaria, y que la orden recibida por estos grupos al servicio de Estados Unidos y sus aliados es la de “no negociar y enfrentar al gobierno de Al Asad hasta las últimas consecuencias”. Por ello el gobierno sirio entiende que se encuentra en un verdadero estado de Guerra y que debe enfrentar a los mercenarios como invasores enemigos del pueblo sirio y reaccionar de forma contundente ante cualquier penetración de fuerzas enemigas extranjera por mar, tierra y aire.

 "Vivimos en un estado real de guerra desde todas las perspectivas", afirmó el mandatario sirio en su discurso durante la primera reunión que mantuvo con los miembros del nuevo Gobierno sirio difundida por la televisora estatal siria el día 27 de junio. "Estamos en guerra, todas las políticas, todos los actores y todos los sectores deben dirigirse a ganar esta guerra" enfatizó el presidente sirio.

Siria apuesta hoy por incrementar las relaciones comerciales con China, Rusia, Irán, con Latinoamérica y África. "Aparentemente, el problema sólo se da con Occidente. Mientras la mayoría de los países del mundo quieren crear relaciones con nosotros, nosotros, durante décadas, hemos querido impulsar los lazos económicos con quienes nos colonizaron directa o indirectamente. Siria debe mantener buenas relaciones con todos los países del mundo, pero tenemos que saber cuáles son nuestros verdaderos intereses", concluyó diciendo Al Assad.

El derribo de un avión militar F-4 turco por las defensas antiaéreas sirias fue una acción defensiva y de determinación a resistir del gobierno sirio. La OTAN y sus aliados de la región ahora entienden que siria cuenta con estratégicas armas capaz de propinarles un daño insoportable.

Pero el pueblo sirio no sólo enfrenta una simple “guerra” contra grupos mercenarios armados y entrenados por EE.UU. y sus aliados de Europa y la región, sino, más bien, enfrenta una guerra de carácter mundial, puesto que en su territorio se disputan los intereses y posiciones geopoliticas y geoestratégicas de Rusia y China, contra los de EE.UU. y sus aliados. No es una exageración cuando se dice que dentro de territorio sirio se da lugar a una nueva Guerra Mundial. El punto más importante de esta nueva guerra mundial que se libra en ese país árabe está en que de su victoria dependerá también la victoria y futuro del nuevo bloque de poder mundial regional que sustentan Rusia y China.    


Presidente sirio, Dr. Bashar Al Asad



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